sábado, 5 de noviembre de 2011

Web 2.0. en los centros VIII: La importancia del ordenador como herramienta educativa


Continúo con el "super" post "Web 2.0. en los centros", a través del cual os he idó y seguiré acercandoos al mundo que rodea la implantación de las TIC en centros educativos, o lo que es lo mismo, el mundo de la Escuela 2.0. Hoy os traigo el punto 1 de una nueva serie de post:

1. La importancia del ordenador como herramienta educativa.

1.1. Caracterísitcas de la interfaz alumno-ordenador que facilitan el proceso de enseñanza-aprendizaje

El proceso de enseñanza – aprendizaje requiere unas condiciones de aprendizaje muy específicas y bien establecidas experimentalmente. La pregunta que el docente debe hacerse es ¿Hasta qué punto el ordenador puede contribuir a garantizar estas condiciones?

Flexibilidad.
El hardware (las máquinas utilizadas) puede llenarse con los programas (software) que mejor se adapten a cada necesidad. Esto permite que el material utilizado sea flexible y adaptable en función de la gran diversidad de software existente. Por otro lado, todo el software tiene “interfaces” o presentaciones al usuario parecidas, lo que facilita la generalización del uso de un programa a otro.

Versatilidad.
El ordenador es una herramienta versátil debido a que puede conectarse a una infinidad de periféricos que facilitan la producción, edición o transformación y presentación de material didáctico en múltiples formatos. A un ordenador puedo acoplar una cámara de fotos digital (con lo que puedo visualizar en tiempo real fotos de los alumnos o de sus actividades), una cámara de video, un escáner para almacenar y visualizar las producciones en papel de los alumnos, micrófonos, equipos de música, reproductores de todo tipo (incluidos DVDs o CDs interactivos educativos). Todo esto puedo verlo en la pantalla del ordenador o proyectarlo gracias a un cañón (o videoproyector) a todo el grupo de alumnos. Con el ordenador y el software apropiado puedo mostrar material didáctico a los alumnos y al mismo tiempo evaluar sus conocimientos, como veremos a lo largo de este curso.

Interactividad.
Es la gran virtud del uso del ordenador. El desarrollo de las tecnologías de redes y de la velocidad de acceso a Internet de los últimos años ha permitido que en el aula, los alumnos puedan tener acceso a todo el conocimiento contenido en la red de redes, filtrado y comentado por el docente. Los alumnos pueden elegir sus propios itinerarios de descubrimiento del conocimiento con un simple clic del ratón, abriendo y cerrando ventanas de información audiovisual. Los alumnos de esta década están inmersos de esta forma en un ambiente educativo que ha multiplicado infinitesimalmente el acceso en tiempo real y con muy poco esfuerzo a la información y material de aprendizaje.

Conectividad.
Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) han transcendido el marco cerrado del centro, aula y grupo de alumnos gracias a las conexiones internas (Intranet) y externas (Extranet) en el mismo centro y entre diferentes centros educativos entre sí. La información puede ser compartida por los alumnos de distintos centros e intercambiada a voluntad. Un alumno dominicano de un aula de 3º de la ESO puede, por ejemplo, enviar una redacción sobre cómo se vive en su país en contraste con el nivel de vida de España a un aula remota de otro instituto de la misma o de otra localidad para que sea analizada por los alumnos de ésta. En fin, las posibilidades son inmensas, si además incluimos en éste análisis superficial de las posibilidades de las nuevas tecnologías, el desarrollo de la tecnología de tráfico de información audiovisual (fotos y vídeos) en tiempo real (videoconferencia).

Conclusiones previas:
Cualquier docente que disponga de un móvil comprende las tremendas posibilidades educativas que supone el desarrollo de la tecnología. Sin embargo, no acabamos de despegar y el desarrollo de la tecnología va muy por delante de su utilización real en las aulas. ¿Por qué?

1.2. Dificultades para la incorporación de las Nuevas Tecnologías en el aula

En España la utilización de las TIC en las aulas está muy por debajo del uso que de ellas hacen los países más avanzados en Educación. La incorporación de estos recursos en el ámbito educativo es lenta debido a los siguientes factores: 
imagen obtenida de este blog
  • Baja o inadecuada dotación en los centros de materiales informáticos. El material informático que encontramos en los centros públicos de enseñanza proviene de la participación de éstos centros en programas cerrados de dotación de material que se denominan con rimbombantes nombres (proyecto Mercurio, proyecto Atenea, proyecto aulas Althia, etc…). Normalmente, los centros reciben “paquetes” de material informático estándar, que hasta el momento han consistido (de cara a las aulas) en la equipación básica de ordenador + impresora + escáner + cámara de fotos. Además, todas las administraciones educativas han realizado grandes esfuerzos para la instalación de redes RDSI en un principio y ADSL más recientemente en los centros. Podemos decir que los centros educativos cuentan con dos tipos básicos de redes: la red interna que conecta varios ordenadores del centro entre ellos y la red externa que los conecta con servidores externos (Internet). Sin embargo, los equipos más necesarios y caros no son enviados a los centros más pequeños y desde luego no a nivel de aula. Hablamos del videoproyector que permite convertir los equipos básicos en auténticas pizarras virtuales con cantidad de aplicaciones educativas. 
  • Bajo nivel de preparación del profesorado en la utilización de las nuevas tecnologías y del material informático disponible. Una cosa es disponer del material necesario y otra muy diferente, darle el uso adecuado. Hasta el día de hoy, al profesorado no se le exige un nivel previo de conocimientos informáticos a nivel de usuario, con lo que los profesionales que acceden a la función pública docente no tienen garantizado un nivel previo de conocimientos que les permitan la utilización de los recursos del centro educativo donde imparten clases. Por otro lado, no existe una formación sistematizada que facilite la actualización de conocimientos sobre las TIC y el uso de los nuevos periféricos y programas. Debido a lo anterior, nos encontramos una formación informática “casual”, que no causal, entre el profesorado, al que no se le exige nivel alguno de desempeño en el uso de las nuevas tecnologías. Podemos concluir que el nivel formativo de los docentes en nuestro país está muy por debajo de lo deseable, y en muchos centros el material informático acumula polvo por falta de uso mientras se vuelve obsoleto.
  • Desconfianza del profesorado en general hacia las posibilidades de las TIC como recursos educativos válidos al nivel de los tradicionales. Las TIC utilizan como base dos materiales diferentes: Por un lado, tenemos el Hardware (las máquinas propiamente dichas) y por otro lado, los programas que las hacen funcionar (Software). La cuestión espinosa en el mundo de las nuevas tecnologías es la actualización, que trae de cabeza a todos los profesionales, empresas e instituciones. Todos sabemos que para hacer un uso eficiente de las TIC, el conocimiento sobre el uso de los periféricos y de los programas que los hacen funcionar deben estar constantemente actualizados; y esto es cierto para las TIC como no lo era, sin embargo para los recursos tradicionales. Nos explicamos: Es cierto que un proyector de diapositivas no puede conectarse a Internet y que sólo sabe hacer una cosa: pasar una y otra vez diapositivas fotográficas de montajes adquiridos hace años. Sin embargo siempre funciona igual. Una vez que el docente aprende a utilizarlo, puede estar haciéndolo durante años sin que deba actualizar su conocimiento sobre ello. Por el contrario, un videoproyector puede enchufarse a un ordenador y reproducir todo tipo de formatos de video, conectarse a Internet y cantidad de cosas más. Un docente puede aprender a utilizar este sistema, pero deberá actualizar su conocimiento de los programas que lo hacen funcionar cada cierto tiempo, a lo largo de toda su vida profesional. 
  • Obstáculos propios de la organización de los espacios y tiempos en los centros educativos, más orientados a metodologías tradicionales de transmisión de conocimientos. Los centros educativos se han concebido en sus espacios y tiempos sobre una concepción unidireccional del aprendizaje: El docente enseña presentando material didáctico a los alumnos, y éstos aprenden tras la asimilación de este material y la explicación orientativa más o menos directiva del docente. Es por eso que los períodos lectivos son todos iguales, que el mobiliario de las aulas se orienta hacia delante, que los espacios comunes se infrautilizan, etc… La utilización de las nuevas tecnologías como recurso educativo demandan de los centros educativos una disposición diferente del espacio y el tiempo, que no incida tanto en el trabajo individual de transformación – asimilación de un material didáctico homogéneo; y que facilite, por el contrario, el trabajo en pequeños grupos, el aprendizaje por el descubrimiento sin limitaciones temporales, la transversalidad del conocimiento y la asimilación significativa de un material al que se ha accedido tras una búsqueda intencional. 
1.3. Condiciones previas para la utilización de las TIC en el aula

La utilización de las TIC en el aula, como herramienta educativa que transciende lo meramente administrativo, requieren de unos requisitos previos bastante exigentes. Con un ánimo exclusivamente pedagógico, vamos a enumerar unas condiciones que todo el mundo debería tener presentes si piensa incorporar las TIC a su dinámica de trabajo en el aula: 

  • Hay tres tareas que deberás realizar inexcusablemente: Elaborar – Presentar – Evaluar. La labor consiste en: elaborar montajes de material didáctico en aplicaciones que permitan su presentación (el formato que preferimos es la presentación de dispositivas con archivos incrustados de sonido, video, imágenes, etc…). Después presentamos el material a los alumnos con el videoproyector (si es un aula informatizada – como las aulas Althia (Castilla la Mancha) – no necesitaremos el videoproyector porque hay varios ordenadores conectados entre sí. Tras la proyección y el trabajo elaborativo y asimilativo de los alumnos, procedemos a evaluar. La evaluación puede realizarse informáticamente como ya hemos visto utilizando los recursos de e-learning o aplicaciones específicas más sencillas.
  • Deberás aprender a manejar al menos tres aplicaciones básicas: Un elaborador - presentador de material didáctico del estilo Power- Point; Un generador de páginas Web (o Blogs como, por ejemplo, Blogger de Google); Un entorno de e-learning como, por ejemplo, Moodle.
  • Deberás tener conocimientos a nivel de usuario de al menos Microsoft Office (o similar), y gestión de cuentas de correo electrónico, chats y foros.
  • Siempre deberás estar atento para actualizar tus conocimientos sobre las TIC y su avance. Un ejemplo: Un docente que no se haya actualizado en los últimos tres años, todavía estará grabando sus datos en el soporte de disco magnético de 3.5 Megabytes; cuando lo normal y adecuado ahora es utilizar memorias compactas tipo Flash de 1 Gigabyte.
  • Nunca bases todo tu esfuerzo educativo ni todos tus métodos en las TIC, las actividades que puedes llevar a cabo con las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación son complementarias de los sistemas tradicionales de enseñanza, que son a los que están habituados los alumnos.
  • Deberías tener en cuenta que todos los alumnos de tu aula – clase no tienen el mismo nivel de desempeño en el uso del ordenador. Debes enseñar a los alumnos a utilizar los recursos que vayas a utilizar.
  • De la misma forma, todos los alumnos no tienen ordenador y/o conexión a Internet en sus domicilios, así que deberás tener esto en cuenta para no beneficiar a unos alumnos en detrimento de otros cuando programes actividades de orientación a distancia desde los domicilios. Recuerda el primer punto: Actualizarse es una necesidad y una obligación cuando estás utilizando las TIC.

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