SISTEMAS DE EVALUACIÓN INFORMATIZADA
1. INTRODUCCIÓN
El desarrollo de las TIC ha tenido como consecuencia la creación de infinidad de aplicaciones que pueden ayudar a los docentes en su labor cotidiana, y de igual forma, contribuir a la motivación de los alumnos al presentar el material de enseñanza – aprendizaje en formas que resultan más amenas y atractivas. La forma en que los profesionales incorporen estas nuevas tecnologías a la práctica cotidiana, dependerá de la confianza que generen las primeras experiencias si resultan exitosas. Hace años se desarrolló una aplicación muy sencilla para la elaboración de presentación de material didáctico interactivo y la creación de sencillas pruebas de evaluación. Recibió el nombre de JClic por su gran sencillez (manejo intuitivo mediante el ratón ¡clic!). Tanto los docentes que han elaborado material con éste programa, como los alumnos que lo han utilizado, en todos los niveles educativos, incluido E.Infantil, coinciden en la sencillez de su manejo y en la versatilidad de su utilización.
JClic es una aplicación exitosa, preferida por el colectivo de docentes en nuestro país para elaborar material didáctico y pruebas de evaluación sencillas. Es probablemente, junto con Power-Point y Hot Potatoes (del que hablaremos más adelante) una de las aplicaciones que más profundamente se ha instalado en el catálogo de herramientas TIC del docente. La aplicación ha madurado y las últimas versiones incorporan un aspecto más profesional y funciones novedosas y útiles, manteniendo en todo momento la sencillez en el manejo, tanto de la elaboración como de la utilización por parte del alumno. La última versión permite la publicación del material generado por cada docente en una página común de Internet, que se convierte en una fuente de recursos inagotable, en la que los docentes pueden encontrar montajes de infinidad de materias organizadas por áreas, etapas, ciclos y niveles.
Por otro lado, Hot Potatoes es una aplicación de origen anglosajón que ha tenido un desarrollo paralelo a JClic y que también es muy utilizado en entornos educativos como aplicación para la evaluación del conocimiento. Las últimas versiones ofrecen un aspecto más logrado y equiparado a los niveles de calidad exigibles y en todo parecidos a los programas profesionales. Asistimos en definitiva a un tímido despegue de los sistemas de evaluación informatizada en los centros educativos, conforme la tecnología se hace más accesible, se desarrollan aplicaciones cada vez más intuitivas y se consigue dotar a los centros educativos de mejores materiales informáticos.
Por otro lado, están los sistemas que ofrecen una asistencia integral, en el sentido de facilitar entornos virtuales que asemejan a la organización típica de aula, con un tutor orientador, material didáctico accesible, pruebas de evaluación informatizadas y canales de comunicación entre los alumnos y entre alumnos y tutor (o docente orientador). Estos sistemas han comenzado a tener un auge cada vez mayor en los últimos años, y tímidamente comienzan a incorporarse a la dinámica más tradicional de enseñanza en base al concepto de “enseñanza full-time”.
2. LIMITACIONES DE LAS ACTIVIDADES DE EVALUACIÓN INFORMATIZADAS.
En cuanto a las actividades de evaluación que se llevan a cabo mediante aplicaciones con el ordenador es necesario hacer notar que:
- La evaluación es siempre cualitativa y “fría”, es decir, la máquina no sabe contextualizar la evaluación ni diferenciar entre un alumno y otro. No sabe la historia de aprendizaje ni los ritmos de cada alumno, y por lo tanto, no puede enmarcar los resultados en algo global y coherente.
- Éste tipo de aplicaciones demanda con preferencia capacidades basadas en el reconocimiento de una información previamente asimilada. Se basa en actividades de tipo objetivo (emparejar, agrupar, identificar semejanzas, categorizar, rellenar espacios en blanco, etc…) en las que el alumno sólo puede elegir una alternativa válida entre muchas posibles. Así que las aplicaciones de este tipo no permiten al alumno transformar la respuesta para ofrecer una alternativa creativa. El alumno debe ceñirse a un abanico preestablecido.
- Cuando evaluamos con estos sistemas, los alumnos que parten de un nivel de conocimientos muy bajo, pueden llegar a aprender las soluciones correctas, ya que se someten a pruebas de ensayo y error repetidas hasta que aprenden la solución correcta por eliminación. De esa forma, se produce un aprendizaje superficial de los contenidos, sin que el alumno probablemente asimile correctamente el material de aprendizaje. Por ejemplo, un alumno puede - por ensayo y error - colocar correctamente los símbolos de la Tabla Periódica de Elementos, pero eso no nos asegura que aprenda el motivo por el que están dispuestos de esa forma, que en realidad es lo más importante.
- Los contenidos de las pruebas de evaluación informatizadas condicionan en cierta forma la información que el alumno considera importante mantener en la memoria. Es posible que un alumno atribuya un significado especial a la fauna que puebla un río en su tramo medio, y que lo estudie con mayor atención cuando asimila los contenidos; sin embargo, si en la prueba de evaluación no se le pregunta por nada de esto, es posible que desarrolle la idea de que, en definitiva, no era tan importante y que lo realmente transcendental es saber dónde nace y desemboca el río por el que se le pregunta en la prueba informatizada. Es decir: las pruebas informatizadas no hacen preguntas del estilo: “Explica con tus palabras la parte de lo que has estudiado que más te gusta”, ya que es una cuestión demasiado amplia y creativa que la máquina no puede evaluar.
- En cuanto a la aplicación de las pruebas de evaluación informatizadas, ya hemos enfatizado el hecho de que requieren un trabajo realmente individual, ya que de otra forma, el alumno más capaz “se come” al alumno menos capaz. De momento, no parece haber en los centros material suficiente para que cada alumno disfrute libremente de su propio ordenador, con lo que hay que rotar a los alumnos y no siempre eso se ajusta a las demandas de los espacios y tiempos en las aulas.
Conclusiones:
Al parecer las limitaciones de los sistemas informatizados de evaluación se traducen en la naturaleza de las tareas a realizar por el alumno que sobrecargan las capacidades basadas en el reconocimiento y que no permiten respuestas genuinamente creativas, por un lado. Por otro lado, la imposibilidad material – debido a la escasez de equipos informáticos en las aulas – de que cada alumno pueda hacer en el momento más adecuado la evaluación de forma individual.
Los sistemas de evaluación informatizada del aprendizaje mediante aplicaciones se desarrollarán beneficiándose de los avances en Inteligencia Artificial y evaluación contextual del aprendizaje, pero en un futuro a medio – largo plazo. Hasta el momento, este tipo de aplicaciones está muy bien para estimular el surgimiento de los conocimientos previos antes de presentar nuevo material didáctico, para fijar contenidos que requieran capacidades basadas en la memoria de reconocimiento y para estimular y motivar a los alumnos más desmotivados. De hecho, tal y como están las aplicaciones en éste momento, las hemos considerado adecuadas para presentar contenidos a los niños y niñas de Educación Especial, ya que la presentación multimedia de material (imágenes, colores, sonidos) sintoniza mucho con lo que prefieren niños con problemas de desarrollo y/o aprendizaje.
4. TIPOS DE ACTIVIDADES DE EVALUACIÓN BASADAS EN APLICACIONES INFORMÁTICAS.
Actividades de texto
Las actividades de texto son ejercicios consistentes en corregir, completar, ordenar o identificar determinados elementos de un texto. Hay seis modalidades diferentes de ejercicios de texto: llenar huecos, completar texto, identificar letras o palabras y ordenar palabras o párrafos. Los ejercicios pueden incluir objetos gráficos y sonoros, así como diversos elementos de ayuda.
Actividades de rompecabezas
El objetivo de los rompecabezas es ordenar los elementos de un conjunto de información que ha sido barajado. Esta información puede ser textual, gráfica o sonora. Los rompecabezas se pueden plantear en cuatro modalidades distintas llamadas: "intercambio", "doble", "agujero" y "memoria".
Actividades de asociación.
El objetivo de las actividades de asociación es descubrir las relaciones entre los elementos de dos conjuntos distintos de información. La información a relacionar puede presentarse en forma de texto, gráficos, sonidos, animaciones, video... o cualquier otro tipo de recurso multimedia.
Actividades de sopa de letras
En las sopas de letras hay que encontrar palabras escondidas, que pueden estar escritas en cualquier dirección. También existe la opción de que a medida que se van encontrando las palabras se descubra una información asociada. La información asociada puede ser textual, gráfica, sonora...
Actividades con crucigramas
Los crucigramas de Clic son como los que podemos encontrar en cualquier periódico o revista...... con la ventaja que las definiciones de las palabras que se cruzan en cada casilla se presentan inmediatamente. Las definiciones acostumbran a ser textuales, pero también pueden ser musicales o sonoras.
5. CONCLUSIONES FINALES
El panorama es halagüeño para las TIC como herramientas de apoyo para la docencia. Las aplicaciones para la evaluación y facilitación del conocimiento han experimentado un impulso sin precedentes en los últimos años. Salvando las dificultades que ya hemos comentado para este tipo de recursos, los próximos años se vislumbran interesantes para el mundo de la educación, que poco a poco, con gran timidez, va incorporando todas estas herramientas al quehacer docente cotidiano. En último lugar, queremos agradecer a los desarrolladores de este tipo de recursos su trabajo y la generosidad que demuestran al compartirlo con el resto de profesionales de la educación en nuestro país; y animar al lector de esta Unidad Didáctica a que practique con el Software comentado la elaboración de pruebas de evaluación.
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